Política Educativa



¿El sistema funciona? Capciosa interrogante...
Hay quienes ni parpadean en decir que no. Tanto particulares como organizaciones.
Desde una posición no académica, ni tampoco secular desinteresada, la respuesta no es inmediata ni mucho menos obvia.
Tan simple que, estoy escribiendo esto, y como muchos, hemos estado sujetos al mismo sistema.
¿Cuál es el verdadero problema? La posición secular limita percibir la envergadura del problema. Pues anualmente hay egresados en todos los niveles, desde preescolar hasta doctorado ¿es a caso la proporción respecto a otros países? ¿Quizá la producción intelectual y tecnológica? ¿Que los resultados de la prueba Enlace son decepcionantes? ¿Que la competencia universitaria es deficiente a nivel internacional?
Hay Hechos de percepción subjetiva: básicamente hay egreso anual y producción intelectual y tecnológica. Y que jodida pero internacionalmente se reconoce lo poco que producimos. Desde competencia universitaria internacional, dos premios nobel, y concursos ganados en diversas materias.
Además, es importante considerar las condiciones en que se desarrollan los países con mejor eficiencia escolar y productiva, que nosotros no. 
Esto me sugiere que el problema no es tan alarmante pero definitivamente no debemos subestimarlo y tenemos que mejorar, porque...
Como docente y alumno, es triste percatarse de 2 cosas:
  1. Que no solo existe el profesorado deficiente, también existen los padres de familia deficientes.
  2. Y que los líderes gubernamentales no son muy competentes al gestionar esta materia.

En cuanto al profesorado, es de Perogrullo para muchos, que el principal obstáculo es el SNTE. Y es cuando uno se da cuenta con tristeza y coraje, que si en verdad a los profesores les importaran sus alumnos, la educación de calidad, superarían los pretextos sindicales.
Si esto no es un muladar educativo, es por esos escasos maestros que sí están comprometidos con la causa. Pero de seguir sometidos al sindicato, esto difícilmente mejorará como muchos deseáramos. La gran mayoría de docentes, son profesorcetes que deberían estar muertos. Hasta que no se insubordinen no merecen lo honores de nadie. Ser profe es uno de los peores empleos, pero una de las mejores profesiones.

En cuanto a los padres de familia, es un aspecto educativo poco valorado, al menos en la educación pública; pues es evidente el escaso interés por verificar que su hijo recibe una educación de calidad. Se limita a inscribirlos y enviarlos a la escuela, ir a juntas o citatorios; pero ¿cuántos se han unido para depurar el cuerpo docente de una escuela? Ni el SNTE podría contra esa unión sinérgica. Bueno, solo asesinando. Sin embargo...
La gran gran mayoría de los padres en la educación básica pública, les es indiferente si sus hijos reciben una educación de calidad o no. Mientras eso no cambie, en comunión de los  hipócritas pocoshuevos profesorcetes, los interesados topamos con una pared aparentemente infranqueable. Como gorupo queriendo mover a la paloma.  

Y no conformes con la muralla impenetrable anterior, nos gustan los retos y degustamos de otra que es mucho peor. La incompetencia, negligencia y soborno del ejecutivo y legislativo.
Para nuestra desgracia, su gracia solo radica en ser buenos parlanchines que sugestionan nuestra esperanza, pues como visionarios su gracia es paupérrima.
Depositan sus "buenos resultados" en mediocre infraestructura y populismo becario.
Pero los involucrados interesados sabemos, los trucos estadísticos y estrategias fraudulentas para disfrazar sus cifras anuales.

No podemos estar esperanzados en los profesorcetes, padres, ni mucho menos en la audacia de los hipóxicos diputados, senadores, gobernadores y presidente.

Es muy complicado, y hasta desmotivante, pero no hay pero lucha que la que no se hace...

W

"GOBERNAR ES EDUCAR"



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